Gestión
Un intrincado e improvisado sistema de tuberías colocado a escasos 40 metros de la naciente de agua del cerro Caramacate de Sabana de Parra, impide que la misma recorra su cauce natural hasta llegar a la parte baja de la montaña. Así lo informó el alcalde de Páez, Carlos Puerta durante una inspección realizada a este pulmón vegetal en compañía de los concejales Freddy Torres y Víctor Giménez, además de triunfadores de Gestión Ambiental de la Universidad Bolivariana de Venezuela aldea Creación Sabana de Parra, brigada ambientalista de Páez, personal de la alcaldía, voceros de consejos comunales, UBCH de Copa Redonda, milicia territorial y funcionarios policiales. 
El complicado sistema para recolectar el agua proveniente del afluente natural, consiste en la construcción de un pequeño muro de aproximadamente 2 metros de largo por 40 o 50 cm de alto ubicado a escasos 40 metros del manantial, con el cual se represa el agua; la cual surte a una docena de mangueras colocadas a modo de drenaje en la parte baja de este pequeño estanque. Puerta indicó que estas mangueras llevan el agua recolectada hasta los diferentes sembradíos y cochineras ubicadas en la parte baja de la montaña. 
Aunado a esta situación, se suma la tala indiscriminada de la vegetación autóctona de la zona, lo cual agrava el problema de la sequía en la zona. En esta fase de inspección, estamos realizando las notificaciones a quienes incurran en las faltas mencionadas en el decreto 3203 emitido por nuestro gobernador Julio León, instrumento legal que reviste de toda formalidad las medidas de protección, aseguramiento y conservación de las fuentes naturales de producción, captación y suministro de agua potable del Estado. 
Las consecuencias de toda esta actividad se ve en la muerte de la flora y fauna que se encuentra en la falda de la montaña, además afectó en 100% al que antes era utilizado como balneario turístico y recreativo ‘chorro de Caramacate’. 
En la zona existe un enorme galpón para la cría de porcinos con más de 500 animales, del cual lanzan sus desperdicios en una laguna, ubicada a menos de 1 km del sector Ceibas de Páez, afectando severamente esta comunidad. Indicó que en esta inspección detectaron la avanzada construcción de pozos profundos de agua potable, de la cual se solicitó la respectiva permisología. Finalmente, Puerta hizo un llamado a todo el colectivo Paence a que se una a esta lucha, por el rescate del pulmón vegetal de todos los Parrenses.
